Desde las poblaciones originarias hasta la actualidad es innegable que América del Sur tiene dos vectores, el de dependencia y el de liberación.
Podemos enumerar la colonización, el proceso de separación de 4 virreinatos en decenas de países por influencia británica (entre otros factores locales) con la creación de estados tapones con el objetivo de debilitar las
economías de la
región y favorecer las importaciones. Hay que ubicarse en la coyuntura de aquella
época para comprender las internas de cada
país y las internas que desarrollaron revoluciones desconectadas del resto del continente.
Que decir de las
minorías gobernantes del siglo
XIX, de las dictaduras orquestadas desde el Norte en el siglo
XX, de la deuda como herramienta de vaciamiento, del
noeliberalismo, de la penetración cultural desde los medios de
comunicación, etc.
Solamente una mano con intereses podía dividir un
continente que compartía el idioma y el devenir
histórico.
Sostengo que nadie que conoce esta realidad y aspira a vivir en una patria mas justa, libre y soberana puede despreciar un proyecto común en América Latina. Si existe un motivo que facilitó la
dominación de los agentes
económicos del imperio uno de los mayores debe haber sido las disputas o la falta de
unión entre patrias vecinas. Los grandes de nuestro
país y de nuestra
América (a mi entender) siempre pensaron en la Patria Grande, porque es mucho mas lo que nos une que lo que nos separa, tenemos los mismo sufrimientos, las mismas historias pendientes, padecemos los mismos males y tenemos los mismos
desafíos y los mismos recursos, desde los naturales hasta el capital humano, pueblos sensibles, capaces de organizarse y solidarios,dispuestos a enfrentarse con
minorías profundamente
egoístas, mezquinas, que descalifican la unión popular como camino y rumbo histórico,
están en la vereda de en frente, van con el
cipayismo y la usura
económica.
Perón, el Che, San
Martín,
Bolívar,
Artigas, Solano
Lopez y en esta época
Chavez,
Evo, Correa, Ortega, son referentes de ese proyecto o idea de futuro.
La unión hace la fuerza con pueblos esclarecidos que son los
únicos que sostienen causas frente a las tentaciones económicas, un pueblo no esclarecido y sin conciencia es
frágil a las limosnas del imperio. Ponerse precio termina siendo barato para ellos y muy caro para nosotros, aprender a sentirnos parte de algo como comunidad por lo menos en los temas de fondo es el
desafío a realizar. Cansado de observar como el liberalismo vuelve disfrazado en discursos de progreso, seguridad y libertades abstractas, pero con el profundo orgullo de saber que nuestro proyecto va de frente dice lo que siente y no teme
ningún castigo en la urnas, decimos pueblo, decimos popular, decimos
nación, decimos patria grande, decimos redistribución del ingreso, decimos revolución. Humildemente creo que hay que seguir utilizando esas palabras y llenarlas de contenido y conceptos, sin disfrazarlas pero agudizando el ingenio para contagiar y crear
espíritu y sentimiento a su alrededor.
Nuestra causa debe ser de las pocas que se hace desde el amor y desde la solidaridad, lo otro que conocemos se relaciona con sacar ventajas en los mercados, especular con el progreso, considerar sistema al mercado y lo que sobra al mercado queda excluido del sistema con una falta de sensibilidad social que asusta.
Bueno compañeros Abrazo Peronista, Latino y Popular.